- Guárdese del pobre el rico, pues no hay enemigo chico.
-
Aconseja permanecer siempre alerta ante el peligro, por pequeño que éste parezca. Ya lo advertía otro refrán judeoespañol: Si tu enemigo es una hormiga, cátalo como a un camello.
Diccionario de dichos y refranes. 2000.